En agosto nos vemos
En
agosto nos vemos –( Gabriel García Márquez)
Largo
de café: En busca de un tranvía llamado deseo.
En una isla del Caribe
“La memoria es a la vez mi materia
prima y herramienta. Sin ella no hay nada”.
Introductio:
La pérdida de memoria es algo que nos
ha sucedido, y no seguirá sucediendo con algún familiar o conocido, hasta nos
pudiera pasar a nosotros mismos, y este era el gran temor del desmemoriado universal, el hombre que no quería vivir cien años solo y, a diferencia del
famoso coronel ‘a el le escribía todo el mundo’.
Pero a pesar de esa pérdida
memorística el siguió con su trabajo, eso no le impidió seguir ejerciendo esa
afición que tanto le gustaba, como era escribir. “En agosto nos vemos”
nos encontraremos con su último esfuerzo estilístico, aunque a Gabo nunca le
gustó este digamos que… trabajo final, pues siempre decía que “no
vale, hay que destruirlo”, sus hijos pensaban todo lo contrario, y
decidieron seguir adelante con el mismo, publicando estas últimas letras del
padre, con un libro que está sin terminar, o que tal vez tenga un final
increíble.
Argumentun:
Podemos decir que… todo comienza un 16
de agosto de un año cualquiera, y todos los meses de agosto, también sin
importar el año, la protagonista toma un transbordador para dirigirse a la isla
donde está enterrada su madre, para visitar la tumba en la que yace, duerme
eternamente. Esto ocurre durante el tiempo en que Ana Magdalena Bach (así se
llamaba también la esposa del famoso compositor, entiendo que será una broma
que Gabo nos quiere marcar) tiene 46 años, terminando cuando cumple la
cincuentena (y tiene ya una edad considerable según el autor. ¿Otra chanza del
mismo, locura o desmemoria?), y en esa isla, en esa visita anual al sepulcro de
la mujer que le dio la vida, la convierte en una persona distinta, con unos ‘actos’
diferentes a los que realiza en la vida diaria, muchas veces anodina, y donde
la vida en pareja puede caer en la maldita rutina, haciéndole pensar que el
deseo puede resultar apasionante, y sentirse deseada por un hombre puede ser
algo muy, muy placentero.
Así que como dice la canción, la historia nos llevará a
‘una isla del Caribe’, donde los restos de una madre fallecida tendrán mucho
que decir, y tal vez que callar.
Ultílogo:
Toda historia tiene su moraleja, todo
relato tiene su porqué, y esta corta narración no iba a ser la excepción, ya
que a parte de la búsqueda de placer y el deseo (algo muy humano, y el que diga
lo contrario miente), podemos resaltar algo muy importante, como es la
comunicación entre padres e hijos, donde sus decisiones (nos gusten o no) y
acciones (iden de lo mismo) en muchas ocasiones no tienen el respaldo ni el
apoyo que necesitan, por miedo al qué dirán.
También hay otro punto igual de significativo
e intrascendental para unos pocos, la grafomanía de Gabo es una enfermedad
que nunca le abandonará (nos abandonará) que siempre está y estará ahí, incluso
cuando perdemos la memoria, cuando esa enorme ballena azul que se pasea a sus
anchas por nuestra cabeza ha volado para siempre en busca de océanos mejores, porque
contar historias es una de las cosas más maravillosas del mundo, incluso cuando
perdemos los sueños que nos han acompañado siempre y nos olvidamos de ellos.
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