El búnker

 



“El búnker” – Mark Haddon

 

Corto de café: ¿Qué es lo que se esconde en el búnker?

 


Fantasmas ingleses (3):


 

Los extraños e inexplicables viajes

 


“Nadine regresaba de un turno de un día en el hospital cuando ocurrió por primera vez. El aire viciado por el sudor, el tabaco y los abrigos húmedos del piso de arriba de un autobús doble de la línea 23…”

 

   En ‘El búnker’ nos encontraremos con unos extraños viajes temporales, donde de fondo y casi sin darnos cuenta estaremos metidos en el interior de un búnker, (ya se que esto es una perogrullada) en los tiempos de la tan temida Guerra Fría, en la ciudad de York. Un soso y flojo relato que por momentos se pierde entre los diferentes estados por los que pasa la protagonista, ahora aquí, ahora allá, más tarde sabe dios dónde, que te hará divagar y perderte (valga la redundancia)  en un atroz aburrimiento, que forzará de mala manera a realizar esta corta y malísima reseña, que es lo que me está sucediendo a mí en estos momentos, y sin realizar ningún tipo de extraño viaje, porque me encuentro disperso, vagando, errando como alma en pena entre los fríos pasillos del dichoso búnker, donde no me he encontrado nada que haya valido la pena, y eso que voy acompañado de una barata y pobre linterna, intentando encontrar la salida…

P.D. No quiero ser malo, o tal vez que penséis que me estoy ensañando con el relato, pero uno tiene que ser sincero, porque esto es como los concursos de la tele, si te ganas una vaca, te llevas la vaca, y si ganas el coche, te marchas con el coche, así que… cuando el relato es malo de solemnidad se dice y no pasa nada.


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