Una fotografía antigua

 



 Una fotografía antigua – (Naguib Mahfuz)

 

 

Corto de café: Qué días los de aquellos años


 

Qué fue de…

 


Una idea, relampagueando de improviso, anunció el fin de su incertidumbre. Surgió cuando sus ojos tropezaron con una vieja fotografía escolar. Estaba preocupado por lo difícil que le resultaba encontrar algo original para la revista: el deber del periodista, la obligación de aportar cotidianamente novedades. Y de pronto le vino la inspiración. La foto llevaba colgada en el mismo sitio, en el cuarto de estar, más de treinta años; discreta, muda, difusa ya. Mas ahora parecía tener algo que decir.

 

Introductio:   

Un conocido periodista egipcio con unos cuantos años de profesión a sus espaldas, le está dando vueltas a la cabeza con el próximo artículo que debe publicar, porque no desea repetirse con los mismos temas de siempre, aquellos que pudieran alejar al lector de visionar su columna, hasta que fija la mirada en una foto de mucho tiempo atrás situada en el salón de la casa, y de la que hacía décadas que no le prestaba demasiada atención. Era una vieja fotografía en la que aparecían los antiguos compañeros de su promoción de bachiller. ¿Qué habrá sido de ellos? ¿Se acordaría de alguno de sus nombres, o habrían pasado a formar parte del olvido y las lagunas del pasado?

Se acordaba de pocos nombres, ya que unos eran conocidos a nivel público y otros eran auténticos desconocidos de la multitud, pero decide entrevistarse con ellos para saber que han sido de sus vidas. Unos se muestran reacios a profundizar en lo que son, en lo que se han convertido, quizás por un oscuro pasado, otros no le dan importancia, y unos menos lo ven como una bendición para poder salir de su maltrecha situación.

La vida pone y dispone, la vida es la que marca nuestro camino, destruye sueños, tiñendo de tinieblas las pocas oportunidades que uno tiene, alejándolas o acercándolas a su antojo, mientras que los más avispados han progresado sin saber como ni porqué a lo más alto de la sociedad, para sorpresa de sus antiguos compañeros, que intentan capear las situaciones de la vida conforme a sus posibilidades, hasta que viene la pregunta final, la misma que se hace el protagonista al comprobar  como les fue a los protagonistas de aquella borrosa instantánea, tomada tiempo atrás.

¿Qué conclusiones podemos sacar de esa vieja fotografía?


Ultima verba:

            Nos encontramos con un Naguib Mahfuz en su más fina esencia, envuelto entre el sufismo religioso patrio y el existencialismo de Proust, con un relato que nos hará pensar sobre el pasado, y como la vida nos va poniendo a cada uno en su sitio, que el (mal)llamado destino nos dará sorpresas, y que ese “callejón de los milagros”, escondido en cualquier callejuela egipcia, aunque también podría ser otra cualquiera de nuestras ciudades, no es tan milagroso como parece según el punto de vista de cómo y dónde miremos, ya que el caleidoscopio de la existencia humana puede ser muy paradójico, y lo que ahí veamos no será tan bonito como nos parece, al igual que la paradoja de la vieja fotografía expuesta en el salón, a la que hacía años que no prestábamos atención.



Comentarios

(Entradas más populares) Si te apetece seguir leyendo...