Sueños en el umbral

 

Sueños en el umbral – (Fátima Mernissi)

 

 

Largo de café: En tiempos del Protectorado.

 

En el umbral del harén

   

  Desde esta ecléctica y silenciosa bitácora podemos decir que con el paso de los años hemos tocado múltiples tramas, y las que nos quedan, aún tenemos cuerda para rato, a pesar de que el tema de los blogs dentro de la red de redes está prácticamente muerto. Hoy vamos acercarnos hasta un país vecino, a Marruecos, con el que nos une muchas cosas, y hablaremos de una de sus grandes ensayistas y pensadoras como es Fátima Mernissi, politóloga e investigadora, conferenciante infatigable y también ‘Premio Príncipe de Asturias de las Letras’ junto a otra gran autora, Susan Sontag.

  Nos encontramos ante una de esas grandes mujeres luchadoras por los derechos de la mujer, en un lugar donde el islam (el integrismo) las coloca siempre en un segundo puesto, el de las olvidadas, relegándolas en todos los aspectos de la vida, hasta en el ámbito familiar, donde la socialización la tienen limitada, sin aspirar a grandes cosas, privándolas de lo más mínimo, educadas para la sumisión y la obediencia.

 En “Sueños en el umbral”, memorias de una niña del harén, Mernissi nos presenta las costumbres de un Marruecos no tan lejano, la ciudad de Fez siempre de fondo, donde la cotidianeidad y la amargura están a la orden del día, unas tradiciones que aún perduran, donde lo vetusto parece ser que nunca pasa de moda, junto a un confinamiento del cual es muy difícil escapar, todo ello visto desde los ojos (la mirada limpia) de una niña, en los tiempos del Protectorado.

Fátima Mernissi, la comprometida autora marroquí que quiso cambiar la imagen de la mujer en el islam, donde en este relato recuerda a su Fez natal.

Ultima verba:

  Unos imposibles sueños de mujer que siempre son dominados y controlados por el hombre, un mundo masculino que predomina sobre todas las cosas, unas mujeres castradas, con una sola libertad, la de pensamiento, la única forma que tienen de volar en esa silenciosa existencia a la cual las ha condenado su género, unos muros los físicos y los religiosos, que las retienen hasta la muerte en una oscuridad, en unas densas tinieblas que envuelven a la sociedad en la que viven.

P.D. - El libro fue una recomendación de uno de los miembros del Club de Lectura Asempa.