La niña alemana




“En esta familia no nos morimos, nos dejamos ir”.

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Los libros de mamá: (3)

        Un tiempo, una parte de nuestra historia que nunca tenía que haber existido y debía ser borrada de nuestra existencia, algo que dice muy poco de nosotros como seres humanos, pues hemos sacado lo peor de nosotros mismos. Dicho esto comenzaré diciendo que no estoy de acuerdo con aquellos que dicen que un libro con poca acción no te puede enganchar.

         Nos encontramos ante una parte de la historia que como siempre hay que esclarecer, una verdadera denuncia de cómo los países europeos, (no es la primera y tampoco será la última) por lo menos aquellos que tenían que dar la cara miraron para el otro lado, mostrando su lado más hipócrita con los ‘ocupantes’ del St. Louis en su viaje de locura hacia la nada entre Hamburgo-La Habana, y luego con el paso de los años pedir perdón por lo que pasó tiempo atrás, algo habitual entre los gobiernos ‘civilizados’, pausadas y tardías disculpas en el tiempo que no valen para nada, porque son un auténtico lavado de cara ante la sociedad de su tiempo. Supongo que a los Rosenthal (la familia protagonista) junto al resto de supervivientes de la malograda travesía las justificaciones llegan demasiado tarde, pues ya no les podrán devolver a sus familiares, desperdigados y fallecidos por medio mundo, ni les curarán las grandes heridas que han provocado sus sufrimientos, eso sin contar con las separaciones de las familias, primero por un gran océano, luego por un continente y finalmente por una “2ª Gran Guerra” provocada como siempre por la estupidez humana.


Imagen del St. Louis barco de la 'discordia'

           Los judíos son y serán un pueblo denostado por la historia y “La niña alemana”  es una recreación, una parte del sufrimiento que tuvieron que padecer, que pasaron en una singladura que fue un recorrido, un atajo hacia la muerte, muy lejos de esa tabla de salvación que tanto ansiaban y esperaban, un suplicio porque en ningún puerto donde atracasen les querían. El trayecto del St. Louis desde Alemania hasta la calurosa isla de Cuba se convirtió en una vergüenza para la humanidad, para los hipócritas gobiernos de la época que hicieron oídos sordos a sus peticiones, algo parecido a lo que estamos viviendo ahora con todos los hombres y mujeres, también los refugiados junto a sus hijos y mayores que son rechazados en su mayoría por aquellos países denominados europeos…, ‘no hay nada nuevo bajo el sol’, donde las ONG,’s luchan y se dejan la piel para que sean recibidos o aceptados por todos aquellos lugares que se denominan civilizados.

           La unión y el encuentro de una familia separada por un destino, un barco, el St. Louis y una isla, Cuba, que nunca fue aceptada como residencia por Hanna Roshental y su familia, dan pie a la historia, que es un calvario, un éxodo en la injusticia por ellos sufrida, y lo que es peor aún una pérdida de identidad tomada como un castigo, una maldición que termina en Anna ‘la niña americana’ que visita a Hanna ‘la niña alemana’, en donde finalmente se cierra el círculo acabando con la maldición de los Rosenthal.



Post scriptum:

            Una historia, por lo menos una parte de la misma vista desde los ojos de una niña, que además es una denuncia (aunque esto ya lo he dicho antes) de la discriminación que sigue ocurriendo hoy día, de raza, religión, a lo que también añadiría de género en muchos países.

           Es un relato donde hay encerrada mucha infelicidad, la historia se repite y se repetirá siempre, en muchos aspectos es cíclica, otras en bucle. Me gusta el apelativo con que Hanna (La niña alemana) denomina a los nazis, llamándoles con el apelativo de ‘Ogros’.

       Debemos aprender de nuestros errores y concienciarnos que este tipo de tragedias no deben de suceder jamás, una problemática que se repite  con otro trasfondo.

Ultílogo:
              
     A mamá siempre le gustó la historia, y estoy convencido que el libro le enganchó por completo desde las primeras páginas, pues en el mismo se narra esa parte de la historia que hay que sacar siempre a la luz, esos fragmentos de nuestro pasado que en ocasiones quieran que permanezca oculta. Un relato sobre la Alemania nazi y de un estúpido comportamiento, de una tragedia sobre el éxodo judío, unos hechos que no deben volver a ocurrir jamás, porque si así es sería para llenarnos de vergüenza.

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