Francoise Hardy

Francoise Hardy

 

Tan solo podemos decir que hay muchas mujeres excepcionales…

No nos hemos equivocado de blog: El momento lo requería, era una gan mujer.

               Tras mucho tiempo vagando por el desierto, en la inhóspita y desconocida para algunos ‘gran ruta de Horus’, los polvorientos caminos del country han despertado de su largo letargo para volver a las andadas, volviendo a romper y torcer botas por esos senderos solitarios donde la música siempre nos acompaña, en compañía de Tinto un jovenzuelo foxhound, raposero o zorrero americano, grandote y de fuerte pelaje, un sabueso de cuidado, un verdadero tanque para ayudarme ante los problemas del camino, con toda la musculatura que a mí me falta. El pobre Oso, ese border collie juguetón que murió de pobre viejo, como los antiguos recolectores de algodón tras una sacrificada vida, lo encontraron unos yarderos texanos, en la zona del Valle de Río Grande, quiso morir solo y solo murió, que los espíritus del Mississippi siempre le protejan allá donde esté, mientras doy los primeros pasos en esta nueva aventura que comienza y que, no sé cuando terminará, suena de fondo una banda sonora, y esta no tiene nada que ver con el famoso Jolene de Dolly Parton, me explico, porque por muy extraño que parezca, suenan otras notas ajenas a las habituales de estas tierras.

         Esta mañana -que tópico más típico- me he despertado con la triste noticia de la muerte de la cantante francesa Francoise Hardy, un verdadero icono del país, una de esas mujeres excepcionales, así que llenos de nostalgia me gustaría dedicarle unas pocas palabras.

In memoriam:

            Fuiste una mujer única e irrepetible, una auténtica ‘bloison noir’, y yo, viejo Teddy Boy donde los haya te recuerdo en estos momentos, donde apareces con tu longuivínea figura, siempre tan parisina, indomable, inmortal, imperecedera. Gustabas de buscar grandes compositores para remarcar siempre esas letras, letras que te han hecho reconocible en todo el mundo mundial, mujer luchadora, mujer de su tiempo.

                   Los que tenemos y padecemos enfermedades raras e incurables (por eso huyo siempre tras los polvorientoscaminos del country) sabemos de tu lucha en conseguir una muerte digna para cada uno de nosotros (que el gran espíritu de Tennessee te guarde). Una cosa más…

Penses-y quand tu t´endors, l´amour est plus fort que la mort

(Piénsalo cuando te duermas, el amor es más fuerte que la muerte)

 

RIP Francoise