La estantería de Emma Watson
Como parte de mi trabajo con ONU ‘Mujeres’
comencé a leer tantos libros y ensayos sobre la igualdad como puedo tener en
mis manos. ¡Hay tantas cosas increíbles por ahí! Divertido,
inspirador, triste, estimulante, empoderador. He estado descubriendo tanto
que, a veces, sentí que mi cabeza estaba a punto de estallar ... Decidí
comenzar un club de libros feministas, ya que quiero compartir lo que estoy
aprendiendo y escuchar tus pensamientos también.
(Emma Watson)
Más de una generación se ha criado leyendo, visionando y
disfrutando de las películas de Harry Potter y sus amigos, en donde destacaba
por encima del resto bajo mi humilde opinión la empollona del grupo, la
sabelotodo, esa lectora empedernida amante de los libros que respondía al
nombre de Hermione (Jean) Granger, una ‘sangre sucia’ que valía su peso en oro,
con unos padres ‘muggles’ que deben de estar muy orgullosos de ella, un ‘picolisto’
a quien todo el mundo preguntaba cuando se veían en un apuro o no sabían de que
iba el rollo, una auténtica Wikipedia ambulante sin necesidad de buscador. J.K.
Rowling creó el personaje perfecto, (su verdadero yo) con esta aventajada
alumna de la ‘Casa de Gryffindor’, a la que le gusta ir escondiendo para
sorpresa de la gente ejemplares de sus admirados libros por el metro
londinense. Muchas veces se puede realizar verdadera magia sin necesidad de
usar y tener en su poder la ‘Varita de Saúco’.
Hoy día Emma Watson la chica que daba vida a nuestra
querida Hermion no deja de sorprendernos por su amor a los libros y a la
lectura. No se sabe en realidad quien es el alter
ego quien, Emma o Hermion, Hermion-Emma, pero eso a mí me da igual, lo que
más me gusta de ella es que en este mundo tan tecnificado, donde la tecnología
es el rey, y para más lástima nuestra la denominada telebasura, ‘telemierda’
más bien, tiene idiotizados al personal, adocenando a una buena parte de la
población con nuestras miserias del día a día, esta maravillosa señorita,
‘única en su especie’, (digo esto con toda la admiración del mundo, y sin echar
de menos al resto de humanos) libera libros, activa feminista mediante estos
compañeros de fatigas que deberían de estar en los altares, ha creado un club
de lecturas que ha cumplido tres años, animando a todo el mundo, (no solamente
a las mujeres) a unas lecturas feministas con sus seguidores, y por ende a los que quieran seguir su ejemplo.
Yo nunca jugué contigo, pero me hubiera apetecido..
Este
animoso club tiene el nombre de Our Shared Shelf, y casi nada, tiene
más de 300.000 seguidores. Un libro cada mes de temática feminista, con unas
recomendaciones que no están nada mal, además, tiene algo que mola un güevo, hay club de debate sobre
las lecturas realizadas, y te puedes unir al mismo registrándote en Goodreads,
un pack de dos en uno que no tiene desperdicio.
Unas estanterías muy
gratas de visitar y de leer, con buena compañía, muy alejada del
“maldito plasma” televisivo que día a día nos está volviendo más y más
gilipollas. Prefiero pertenecer a la “especie” lectora de la empollona Hermion,
que a esta última y extraña ‘generación chafardera’, amiga de los asuntos del
prójimo, de revolver mierda en vidas ajenas, cuando en realidad podían
dirigirse a una buena biblioteca, las Municipales son maravillosas, y revolver
en sus cientos de títulos, para escoger después los que más nos gusten,
lanzándonos a una verdadera aventura que muchos no saben aprovechar. ¿Te ánimas
a visitar conmigo las estanterías de nuestra amiga Emma Watson?
Una mujer implicada con su tiempo, una mujer que no pierde el tiempo, y una mujer de su tiempo.
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